
Su sustituta fue Marta Sánchez, una rubia que levantaba pasiones por sus atributos y la verdad es que cantaba bien y todo por el mismo precio.
A finales de 1985 presentaron a la nueva cantante con el lanzamiento del single y maxi y Lilí Marlén, que empezó a sonar en todas las emisoras y televisiones, destacando el relevo simbólico que Vicky Larraz dio a Marta Sánchez. El éxito les volvió a sonreír y esto propició el lanzamiento de su tercer álbum en 1986, bajo el título de "Bailando sin salir de casa"
No hay comentarios :
Publicar un comentario